Claves para invertir tus ahorros desde hoy

Si algo nos ha enseñado la crisis económica que todo se lo llevó por delante en 2008 es que contar con unos ahorrillos no ha de ser solamente una opción para aquellos que gozan siempre de vacas gordas, sino todo lo contrario. Saber ahorrar se ha vuelto más que nunca un ejercicio de obligado cumplimiento en previsión de pequeños o grandes baches que están siempre al acecho. Ahora bien, al igual que rellenar el colchón de billetes no parece el mejor modo de mantener nuestro patrimonio a salvo, tampoco engordar nuestra cuenta de ahorro sin más miramientos está exento de consecuencias negativas a la hora de ahorrar. Sin ir más lejos, la evolución de los precios a lo largo de los años en los que nuestros ahorros están inmovilizados puede implicar una pérdida progresiva de poder adquisitivo debido a la inflación.

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Por otra parte, hay que tener en cuenta que cuando ahorramos bien no solo dejamos de perder poder adquisitivo, sino que podemos incluso rentabilizar nuestros ahorros mediante un abanico de posibilidades de inversión que se adaptan a todos los perfiles. En este sentido, ante tanta oferta, mucha gente se pregunta ¿dónde puedo invertir mis ahorros entre todas estas opciones? Pues bien, lo cierto es que para cada perfil inversor existe un cierto tipo de producto financiero, y que escogerlo bien es una de las claves para hacer que nuestro colchón se infle según nuestras necesidades.

El perfil inversor depende esencialmente de tres factores principales. El primero, sin duda, tiene que ver con la cantidad de dinero que manejamos. El segundo, por el contrario, está relacionado con nuestros objetivos. Y, por último, un determinante esencial es nuestra propensión al riesgo. De esta manera, saber si nuestros ahorros tienen por objetivo la adquisición de una casa o la realización de un viaje tendrán consecuencias directas sobre el modo en el que afrontamos nuestro proyecto de inversión. Del mismo modo, en función de nuestro nivel de ambición en términos de rentabilidad y aceptación de las potenciales pérdidas, podremos decidir sin dificultad la estrategia que se adecúa a nuestras necesidades.